Max Wright, recordado por interpretar al icónico padre de Alf, Willie Tanner, tuvo una vida tan complicada como controvertida. Su carrera, que parecía prometedora, estuvo marcada por conflictos con el trabajo, problemas de salud y comportamientos que lo alejaron de los focos. A pesar de su talento, Wright nunca disfrutó del éxito de la serie que lo hizo famoso y, en sus últimos años, vivió sumido en la polémica y el aislamiento.
©YouTube. El peso de interpretar a Willie Tanner
Max Wright nació el 2 de agosto de 1943 en Detroit, Michigan. Antes de alcanzar la fama, dedicó gran parte de su vida a las artes escénicas, participando en obras de teatro y varias producciones televisivas. En 1965 se casó con Linda Wright, con quien tuvo dos hijos, Daisy y Ben.
La vida de Wright cambió por completo cuando en 1986 fue elegido para interpretar a Willie Tanner en Alf, una comedia que narraba las aventuras de un extraterrestre en la Tierra. Aunque la serie fue un fenómeno cultural y un gran éxito durante sus cuatro temporadas, Wright odiaba su trabajo.
En entrevistas, el actor calificó la experiencia como "difícil y desagradable". Los largos días de grabación, combinados con el trabajo con el muñeco de Alf, le causaron un profundo malestar. Su descontento llegó a tal punto que, tras finalizar la última escena de la serie, abandonó el plató sin despedirse de sus compañeros.
Una carrera marcada por altibajos
Además de Alf, Max Wright participó en otras producciones conocidas, como las series Cheers, Through Time y Crazy About You. También brilló en el teatro, obteniendo una nominación al premio Tony en 1998 por su actuación en Ivanov.
Sin embargo, su papel de Willie Tanner lo encasilló y nunca pudo replicar el nivel de éxito que tuvo con la serie. Incluso se negó a participar en la película de Alf realizada en 1996, demostrando un total rechazo al personaje que le había dado fama.
©YouTube. Escándalos y una vida personal turbulenta.
La vida personal de Wright estuvo marcada por problemas de salud y graves controversias. En 1995 le diagnosticaron linfoma, un tipo de cáncer contra el que luchó durante más de 20 años con quimioterapia. Aunque logró recuperarse temporalmente en varias ocasiones, la enfermedad nunca lo abandonó del todo.
En la década de 2000, su imagen pública se deterioró rápidamente. Fue detenido dos veces por conducir en estado de ebriedad, pero el mayor escándalo se produjo en 2012, cuando el diario National Enquirer publicó imágenes del actor consumiendo crack y teniendo encuentros sexuales con personas sin hogar.
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El material generó una ola de críticas y prácticamente acabó con su carrera. Wright inicialmente negó las acusaciones, pero las pruebas y los testimonios de los involucrados fueron convincentes. Según los informes, su comportamiento fue el resultado de vivir sin control después de separarse de su esposa.
El triste final de Max Wright
Los escándalos y el desgaste de su enfermedad le alejaron de la vida pública. Su última aparición notable fue en dos episodios de Friends, donde interpretó a Terry, el dueño de Central Perk.
Max Wright falleció en junio de 2019, a los 75 años, tras una larga batalla contra el cáncer. A pesar de los altibajos de su carrera y los problemas que enfrentó, su legado como parte de Alf sigue vivo en la memoria de quienes crecieron viendo la serie.
La historia de Max Wright refleja cómo el éxito en la pantalla no siempre se traduce en felicidad personal y cómo las luchas internas pueden moldear el destino de las personas, incluso en la cima de la fama.
